Evaluación de Fracturas de los Huesos de la Mano
Los traumatismos que afecten los dedos, los nudillos, la zona palmar y dorsal de la mano pueden comprometer sus componentes óseos. Las fracturas frecuentes del carpo comprenden las fracturas del escafoides y las fracturas del gancho del ganchoso (o gancho del hueso hamato), que por lo general se consideran fracturas de muñeca. Así mismo, debido a la fragilidad de los dedos, las falanges quedan expuestas a fracturas.
Para el normal funcionamiento de la mano, deben trabajar juntos muchos músculos, tendones, ligamentos y huesos. Las fracturas aparentemente menores de sus componentes óseos pueden lesionar gravemente las partes blandas. Un incorrecto manejo de estas lesiones pueden llevar a la rigidez de las articulaciones, tornarlas débiles o deformándolas, condicionando la incapacidad del paciente.